MISECADE
SANDOZ
Denominación genérica: Bortezomib.
Forma farmacéutica y formulación: El frasco ámpula con liofilizado contiene: Éster borónico de manitol equivalente a 3.5 mg de Bortezomib. Excipiente cbp.
Indicaciones terapéuticas: Bortezomib como monoterapia o en combinación con doxorrubicina liposomal pegilada o dexametasona está indicado para el tratamiento de pacientes adultos con mieloma múltiple progresivo que han recibido al menos 1 terapia previa y que ya se han sometido o no son candidatos para un trasplante hematopoyético de células madre. Bortezomib en combinación con melfalán y prednisona, está indicado para el tratamiento de pacientes adultos con mieloma múltiple que no ha sido tratado previamente y que no son candidatos para quimioterapia de dosis alta con trasplante hematopoyético de células madre. Bortezomib en combinación con dexametasona, o con dexametasona y talidomida, está indicado para la inducción al tratamiento en pacientes adultos con mieloma múltiple que no ha sido tratado previamente y que son candidatos para quimioterapia de dosis altas con trasplante hematopoyético de células madre. Bortezomib en combinación con rituximab, ciclofosfamida, doxorrubicina y prednisona, está indicada para el tratamiento de pacientes adultos con linfoma de células del manto que no ha sido tratado previamente y quienes no son candidatos para un trasplante hematopoyético de células madre.
Farmacocinética y farmacodinamia: Farmacocinética: Absorción: Después de administrar por vía intravenosa una dosis de 1.0 mg/m2 y 1.3 mg/m2 en bolo a 11 pacientes con mieloma múltiple y valores de depuración de creatinina > a 50 ml/min, el promedio de las concentraciones plasmáticas máximas de la primera dosis de Bortezomib fueron 57 y 112 ng/ml, respectivamente. En dosis subsecuentes, estas concentraciones máximas promedio en plasma observadas tuvieron rangos desde 67 hasta 106 ng/ml para la dosis de 1.0 mg/m2 y de 89 a 120 ng/ml para la dosis de 1.3 mg/m2.Después de la administración endovenosa de un bolo intravenoso o una inyección subcutánea de una dosis de 1.3 mg/m2 en pacientes con mieloma múltiple (n=14 en el grupo intravenoso, n=17 en el grupo subcutáneo), la exposición sistémica total después de la administración de dosis repetidas (AUCúltima), fue equivalente para las administraciones subcutáneas e intravenosas. La Cmax después de la administración subcutánea (20.4 ng/ml) fue menor que la intravenosa (223 ng/ml). La AUCúltima de radio medio geométrico fue de 0.99 y el 90% de los intervalos de confianza fueron de 80.18%-122.80%. Distribución: El volumen medio de distribución (Vd) del Bortezomib tuvo rangos desde 1,659 a 3,294 litros después de una administración intravenosa de una sola dosis o de dosis repetida de 1.0 mg/m2 ó de 1.3 mg/m2 en pacientes con mieloma múltiple. Esto sugiere que el Bortezomib se distribuye ampliamente en los tejidos periféricos. Dentro del rango de concentración de Bortezomib de 0.01 a 1.0 mg/ml, la unión de proteínas in vitro fue en promedio del 82.9% en el plasma humano. La fracción del Bortezomib unida a las proteínas de plasma no depende de su concentración. Biotransformación: Estudios in vitro con microsomas hepáticos humanos e isozimas del citocromo P450 expresados en el ADNc humano, indican que el Bortezomib se metaboliza en forma primaria mediante oxidación por medio de las enzimas del citocromo P450, 3A4, 2C19 y 1A2. La vía metabólica mayor es deboronación para formar dos metabolitos desboronados que subsecuentemente pasan por hidroxilación a varios metabolitos. Los metabolitos deboronotados de Bortezomib se encuentran inactivos como inhibidores de la proteasoma 26S. Eliminación: La vida media promedio de eliminación (t½) del Bortezomib administrado en dosis repetidas, se observó dentro del rango de 40-193 horas. El Bortezomib se elimina más rápidamente después de la primera dosis en comparación con las dosis subsecuentes. Las eliminaciones corporales totales promedio fueron de 102 y de 112 l/h después de la primera dosis para dosis de 1.0 mg/m2 y 1.3 mg/m2 respectivamente, dentro de rangos de 15 a 32 l/h y de 18 a 32 l/h después de dosis subsecuentes de 1.0 mg/m2 y 1.3 mg/m2, respectivamente. Poblaciones especiales: Deterioro hepático: El efecto del deterioro hepático en la farmacocinética del Bortezomib se evaluó en un estudio de Fase I durante el primer ciclo de tratamiento, incluyendo a 61 pacientes con tumores sólidos primarios y diversos grados de deterioro hepático con un rango de dosis de Bortezomib de 0.5 a 1.3 mg/m2. Cuando se comparó con pacientes cuya función hepática fue normal, la falla hepática leve no alteró la normalización de dosis del AUC del Bortezomib. Sin embargo, los valores medios de AUC de dosis normalizada aumentaron aproximadamente un 60% en pacientes con deterioro hepático moderado o grave. Se recomienda una dosis de comienzo más baja para los pacientes con falla hepática moderada o grave, y esos pacientes deben monitorearse con cuidado (véase Dosis y vía de administración Tabla 6). Deterioro renal: Se realizó un estudio farmacocinético en pacientes con diversos grados de deterioro renal que fueron clasificados de acuerdo con sus valores de depuración de creatinina (CrCL) en los siguientes grupos: Normal (CrCL ≥ 60 ml/min/1.73 m2, n=12), Leve (CrCL = 40-59 ml/min/1.73 m2, n=10), Moderado (CrCL = 20-39 ml/min/1.73 m2, n=9) y Grave (CrCL < 20 ml/min/1.73 m2, n=3). Un grupo de pacientes en diálisis que recibieron dosis después de la sesión dialítica, también fueron incluidos en el estudio (n=8). A los pacientes se les administraron dosis intravenosas de 0.7 a 1.3 mg/m2 de Bortezomib dos veces a la semana. La exposición del Bortezomib (AUC de dosis normalizada y Cmax) fue comparable en todos los grupos (véase Dosis y vía de administración). Farmacodinamia: Grupo farmacoterapéutico: Agentes antineoplásicos, otros agentes antineoplásicos, código ATC: L01XX32. Mecanismo de acción: El Bortezomib es un inhibidor de proteasoma. Está diseñado específicamente para inhibir la actividad similar a la quimiotripsina de la proteasoma 26S en las células de los mamíferos. La proteasoma 26S es un complejo grande de proteína que degrada las proteínas ubiquitinadas. La vía de ubiquitina-proteasoma juega un rol esencial en la regulación del movimiento de proteínas específicas, de ese modo se mantiene la homeostasis dentro de las células. La inhibición de la proteasoma 26S previene esta proteólisis blanco y afecta a varias cascadas de señales dentro de la célula, resultando en muerte de las células cancerígenas. El Bortezomib es altamente selectivo para la proteasoma. A concentraciones de 10 mM el Bortezomib no inhibe ninguno de entre una amplia variedad de receptores y de proteasas evaluadas y es más de 1,500 veces más selectivo para la proteasoma que para su siguiente enzima preferible. La cinética de la inhibición de proteasoma se evaluó in vitro y se demostró que el Bortezomib puede desasociarse de la proteasoma en un tiempo promedio (t½) de 20 minutos, lo que demuestra que la inhibición de proteasoma por medio de Bortezomib es reversible. La inhibición de proteasoma mediada por el Bortezomib afecta a las células cancerígenas de varias formas, incluyendo, pero no limitado a la alteración de proteínas reguladoras que controlan la progresión del ciclo celular y al factor de activación nuclear kappa B (NF-kB). La inhibición de la proteasoma resulta en falla del ciclo celular y apoptosis. El NF-kB es un factor de transcripción cuya activación es necesaria en varios aspectos de la génesis tumoral, incluyendo crecimiento celular y supervivencia, angiogénesis, interacciones célula-célula, y metástasis. En el mieloma, el Bortezomib afecta la habilidad de las células de mieloma para interactuar con el micro-ambiente de la médula ósea. Los estudios experimentales han demostrado que el Bortezomib es citotóxico para una variedad de tipos de células cancerígenas que a su vez son más sensibles a los efecto pro-apoptóticos de la inhibición de proteasoma que lo observado en células normales. El Bortezomib reduce el crecimiento tumoral in vivo en varios modelos de tumores pre-clínicos, incluyendo mieloma múltiple. La información in vitro, in vivo y modelos animales con Bortezomib sugieren que éste incrementa la diferenciación y actividad osteobláticas e inhibe la función osteoclástica. Estos efectos se han observado en pacientes con mieloma múltiple afectados por una enfermedad oseolítica avanzada y que fueron tratados con Bortezomib. Eficacia clínica en pacientes con mieloma múltiple, que no han sido tratados previamente: Un estudio clínico prospectivo de Fase III, internacional, aleatorizado (1:1) y abierto (MMY-3002 VISTA) de 682 pacientes fue realizado para determinar si el Bortezomib (1.3 mg/m2 administrado por vía intravenosa), en combinación con el melfalán (9 mg/m2) y prednisona (60 mg/m2), provocó una mejora en el tiempo de progresión (TTP), en comparación con melfalán (90 mg/m2) y prednisona (60 mg/m2) en pacientes con mieloma múltiple sin tratamiento previo. El tratamiento se administró por un máximo de 9 ciclos (aproximadamente 54 semanas) y se descontinuó en forma temprana en casos de progresión de la enfermedad o por toxicidad inaceptable. La edad media de los pacientes en el estudio fue de 71 años, 50% fueron hombres, 88% caucásicos y la puntuación promedio del desempeño de Karnofsky, fue de 80. Los pacientes tuvieron un mieloma IgG/IgA/cadenas ligeras en el 63%/25%/8% de las situaciones, hemoglobina sérica promedio de 105 g/l, y recuento promedio de plaquetas de 221.5 x 109/l. Proporciones similares de pacientes tuvieron mostraron una depuración de creatinina de ≤ 30 ml/min (3% en cada brazo). Al momento del análisis temporal pre-especificado, el criterio primario de eficacia "tiempo de progresión", se cumplió, por lo que se le ofreció tratamiento Bz+M+P a los pacientes del brazo M+P. La media de seguimiento fue de 16.3 meses. La actualización final de sobrevida se realizó con una duración promedio del seguimiento de 60.1 meses. Se observó un beneficio de sobrevida estadísticamente significativo en favor al grupo de tratamiento Bz+M+P (HR = 0.695; p = 0.00043), a pesar de las terapias subsecuentes que incluyeron regímenes basados en Bortezomib. La sobrevida promedio del grupo de tratamiento Bz+M+P fue de 56.4 meses en comparación con 43.1 para el grupo de tratamiento M+P. Los resultados de eficacia se presentan en la Tabla 1.
Pacientes elegibles para trasplantes de células madre: Dos estudios de Fase III, aleatorizados, abiertos y (IFM-2005-01, MMY-3010), se realizaron para demostrar la seguridad y la eficacia del Bortezomib en combinaciones dobles y triples con otros agentes quimioterapéuticos, como terapia de inducción previa al trasplante de células madre en pacientes con mieloma múltiple que no ha sido tratado previamente. En el estudio IFM-2005-01 el Bortezomib combinado con dexametasona [BzDx, n=240] se comparó con vincristina-doxorrubicina-dexametasona [VDDx, n=241]. Los pacientes en el grupo BzDx recibieron cuatro ciclos de 21 días, cada uno consistió de Bortezomib (1.3 mg/m2 administrado por vía intravenosa dos veces a la semana en los días 1, 4, 8 y 11), y dexametasona oral (40 mg/día en los días 1 a 4 y los días 9 a 12, en los ciclos 1 y 2, y en los días 1 a 4 en los ciclos 3 y 4). Los trasplantes autólogos de células madre fueron recibidos por 198 (82%) y 208 (87%) pacientes en los grupos VDDx y BzDx, respectivamente; La mayoría de los pacientes fueron sometidos a un procedimiento de trasplante. La demografía de los pacientes y las características basales de la enfermedad fueron similares entre los grupos de tratamiento. La edad media de los pacientes en el estudio fue de 57 años, el 55% fueron hombres y el 48% de los pacientes tenían citogenética de alto riesgo. La duración media del tratamiento fue de 13 semanas para el grupo VDDx y de 11 semanas para el grupo BzDx. El número promedio de ciclos que fueron recibidos en ambos grupos fue de 4 ciclos. El criterio primario de eficacia fue la tasa de respuesta post-inducción Cr + nCR. Se observó una diferencia estadísticamente significativa en CR + nCR a favor de Bortezomib combinado con el grupo de dexametasona. Los criterios secundarios de eficacia incluyeron las tasas de respuesta post-trasplante (CR+nCR, CR+NCR+VGPR+PR), sobrevida libre de progresión y sobrevida global. Los principales resultados de eficacia se presentan en la Tabla 2.
En el estudio MMY-3010, el tratamiento de inducción con Bortezomib combinado con talidomida y dexametasona [BzTDx,n=130] se comparó con talidomida-dexametasona [TDx, n=127]. Los pacientes en el grupo BzTDx recibieron seis ciclos de 4 semanas, cada uno consistió de Bortezomib (1.3 mg/m2 administrado dos veces a la semana en los días 1, 4, 8 y 11, seguido por un periodo de descanso de 17 días desde el día 12 al día 28), dexametasona (40 mg administrados oralmente en los días 1 a 4 y en los días 8 a 11) y talidomida (administrada oralmente 50 mg diario en los días 1-14, aumentó a 100 mg en los días 15-28 y después de eso 200 mg al día). El trasplante autólogo de células madre fue recibido por 105 (81%) y 78 (61%) de los pacientes en los grupos BzTDx y TDx, respectivamente. La demografía de los pacientes y las características basales de la enfermedad fueron similares entre los grupos de tratamiento. Los pacientes en los grupos BzTDx y TDx respectivamente tuvieron una edad media de 57 vs. 56 años, 99% vs. 98% de los pacientes fueron caucásicos y 58% vs. 54% fueron hombres. En el grupo BzTDx el 12% de los pacientes fueron clasificados citogenéticamente como de alto riesgo contra el 16% de los pacientes en el grupo TDx. La duración promedio del tratamiento fue de 24.0 semanas y el número promedio de los ciclos de tratamiento recibidos fue de 6.0 lo que fue consistente en los grupos de tratamiento. Los criterios primarios de eficacia del estudio fueron las Tasas de respuesta post-inducción y post-trasplante (CR+nCR). Se observó una diferencia estadísticamente importante en CR+nCR en favor del grupo de Bortezomib en combinación con dexametasona y talidomida. Los criterios secundarios de eficacia incluyeron la Sobrevida Libre de Progresión y la Sobrevida General. Los principales resultados de eficacia se presentan en la Tabla 3.
Eficacia clínica en mieloma múltiple refractario o de reincidencia: La seguridad y la eficacia del Bortezomib (administrado por vía intravenosa), se evaluaron en 2 estudios con la dosis recomendada de 1.3 mg/m2: un estudio de Fase III aleatorizado y comparativo (APEX) contra dexametasona (Dex), de 669 pacientes con mieloma múltiple refractario o de reincidencia, que han recibido 1-3 líneas de terapia previa de terapia y un estudio de Fase II de un solo brazo de 202 pacientes con mieloma múltiple refractario y de reincidencia, quienes recibieron al menos 2 líneas previas de tratamiento y que estaban progresando en su tratamiento más reciente. En el estudio de Fase III, el tratamiento con Bortezomib provocó un tiempo significantemente mayor de progresión (TTP), una sobrevida significantemente prolongada y una tasa significantemente mayor de respuesta en comparación con el tratamiento con dexametasona (véase la Tabla 4), en todos los pacientes así como en aquellos pacientes que recibieron 1 línea previa de tratamiento. Como resultado de un análisis transitorio pre-planeado, el brazo de dexametasona se detuvo ante la recomendación del comité de monitoreo de información y a todos los pacientes que fueron aleatorizados con dexametasona se les ofreció Bortezomib, sin importar el estado de la enfermedad. A causa de este cambio temprano, la duración media del seguimiento para los pacientes que sobrevivieron fue de 8.3 meses. En pacientes que fueron refractarios a su última terapia previa y en aquellos que no fueron refractarios, la sobrevida general y la Tasa de respuesta fueron significativamente mayores en los pacientes tratados con Bortezomib. De los 669 pacientes incluidos, 245 (37%) tenían 65 años de edad o más. Los parámetros de respuesta así como el TTP fueron significativamente mejores en aquellos tratados con Bortezomib independientemente de su edad. Sin importar los niveles basales de b2-microglobulina, todos los parámetros de eficacia (TTP y la sobrevida general, así como la Tasa de respuesta), mejoraron significativamente en el grupo de tratamiento con Bortezomib. En la población refractaria del estudio de Fase II, las respuestas fueron determinadas por medio de un comité de revisión independiente y los criterios de respuesta fueron acordes al Grupo Europeo de Trasplante de Médula Ósea. La sobrevida promedio de todos los pacientes incluidos fue de 17 meses (rango de < 1 a + de 36 meses). Esta sobrevida fue mayor que la sobrevida promedio de seis a nueve meses anticipada por los investigadores clínicos de consulta para una población similar de pacientes. Mediante análisis multivariado, la Tasa de respuesta fue independiente del tipo de mieloma, el estado de desempeño, el estado de eliminación del cromosoma 13 o el número o tipo de terapias previas. Los pacientes que habían recibido de 2 a 3 regímenes terapéuticos previos tuvieron un índice de respuesta del 32% (10/32) y los pacientes que tuvieron más de 7 regímenes terapéuticos previos tuvieron un índice de respuesta del 31% (21/67).
En el estudio de Fase II, los pacientes que no obtuvieron una respuesta óptima a la monoterapia con Bortezomib fueron aptos para recibir dexametasona a dosis altas en conjunción con el Bortezomib. El protocolo permitía a los pacientes recibir dexametasona si ellos presentaban menos de una respuesta óptima a la monoterapia con Bortezomib. En total, a 74 pacientes se les administró dexametasona en combinación con el Bortezomib. El dieciocho por ciento de los pacientes alcanzaron, o tuvieron una respuesta mejorada [MR (11%) o PR (7%)] con el tratamiento de combinación. Eficacia clínica con la administración subcutánea de Bortezomib en pacientes con mieloma múltiple refractario/reincidencia: Un estudio abierto, aleatorizado, de Fase III y de no-inferioridad, comparó la eficacia y la seguridad de la administración de Bortezoimib por vía subcutánea ó intravenosa. Este estudio incluyó a 222 pacientes con mieloma múltiple refractario / de reincidencia, quienes fueron aleatorizados en un radio de 2:1 para recibir 1.3 mg/m2 de Bortezomib mediante vía subcutánea o mediante la vía intravenosa durante 8 ciclos. A los pacientes que no obtuvieron una respuesta óptima (menos que la Respuesta Completa [CR]) a la terapia sólo con el Bortezomib después de 4 ciclos se les permitió recibir dexametasona 20 mg diarios en el día de y después de la administración de Bortezomib. Los pacientes con una neuropatía periférica basal de Grado ≥ 2 o recuentos plaquetarios < 50,000/ml fueron excluidos. Un total de 218 pacientes fueron evaluados para la respuesta. Este estudio cumplió su objetivo de no-inferioridad para la Tasa de respuesta (CR+PR) después de 4 ciclos del agente único Bortezomib por vías subcutánea e intravenosa, de 42% en ambos grupos. Además, los criterios secundarios de eficacia relacionados con el tiempo para el evento mostraron resultados consistentes para la administración subcutánea intravenosa (Tabla 5).
Se realizó un estudio clínico de Fase III, aleatorizado, de grupos paralelos, abierto y multicéntrico en 646 pacientes para comparar la seguridad y la eficacia del Bortezomib más doxorrubicina liposomal pegilada contra monoterapia de Bortezomib en pacientes con mieloma múltiple que han recibido al menos una terapia previa y no hayan progresado mientras recibían terapia basada en antraciclina. El criterio primario de eficacia fue el TTP mientras que los criterios secundarios de eficacia fueron OS y ORR (CR+PR), utilizando el criterio del Grupo Europeo de Trasplante de Sangre y de Médula Ósea (EBMT). Un análisis transitorio definido por el protocolo (basado en los 249 eventos TTP) detonó la terminación temprana del estudio por eficacia. Este análisis transitorio mostró una reducción de riesgo del TTP del 45% (IC del 95%; 29-57 %, p < 0.0001), para los pacientes tratados con terapia de combinación de Bortezomib y doxorrubicina liposomal pegilada. El TTP medio fue de 6.5 meses para los pacientes con monoterapia de Bortezomib en comparación con los 9.3 meses para los pacientes con terapia de combinación de doxorrubicina liposomal pegilada más Bortezomib. Estos resultados, aunque no son maduros, constituyeron el análisis final definido por el protocolo. Tratamiento de combinación de Bortezomib con dexametasona: Ante la ausencia de alguna comparación directa entre el Bortezomib y el Bortezomib en combinación con la dexametasona en pacientes con mieloma múltiple progresivo, se realizó un análisis estadístico de conjunto para comparar los resultados del brazo no-aleatorizado de Bortezomib en combinación con dexametasona (estudio de Fase II abierto MMY-2045), con resultados obtenidos en los brazos de monoterapia de Bortezomib de diferentes estudios aleatorizados de Fase III (M34101-039 [APEX] y DOXIL MMY-3001) en la misma indicación. El análisis pareado es un método estadístico en el que los pacientes en el grupo de tratamiento (por ejemplo, Bortezomib en combinación con dexametasona) y pacientes en el grupo de comparación (por ejemplo, Bortezomib) se hacen comparables respecto a los valores de confusión a través del apareamiento individual de los sujetos de estudio. Esto minimiza los efectos de los factores de confusión observados cuando se estiman los efectos del tratamiento utilizando información no-aleatorizada. Se identificaron 127 pares de pacientes en conjunto. El análisis demostró una mejoría del ORR (CR+PR) (OR 3.769; IC del 95% 2.045-6.947; p < 0.001), del PFS (radio de riesgo de 0.511; IC del 95% 0.309-0.845; p=0.008), del TTP (radio de riesgo de 0.385; IC del 95% 0.212-0.698; p=0.001) para el Bortezomib en combinación con dexametasona en comparación con la monoterapia de Bortezomib. La información limitada en el re-tratamiento con Bortezomib en mieloma múltiple de reincidencia está disponible. El estudio de etiqueta abierta MMY-2036 de Fase II (RETRIEVE), de un brazo, se realizó para determinar la eficacia y la seguridad del re-tratamiento con Bortezomib. Ciento treinta pacientes (≥ 18 años de edad), con mieloma múltiple que habían tenido al menos una respuesta parcial previa bajo un régimen que contiene Bortezomib, fueron re-tratados ante progresión de la enfermedad. Al menos 6 meses después de la terapia previa, el Bortezomib se empezó en la última dosis tolerada de 1.3 mg/m2 (n=93) o ≤ 1.0 mg/m2 (n=37) y se administró en los días 1, 4, 8 y 11 cada 3 semanas durante un máximo de 8 ciclos, como un agente único o en combinación con dexametasona de acuerdo con el estándar de cuidado. La dexametasona se administró en combinación con el Bortezomib en 83 pacientes en el Ciclo 1 con 11 pacientes adicionales que recibieron dexametasona durante el curso de los ciclos de re-tratamiento con Bortezomib. El criterio primario de respuesta fue la mejor respuesta confirmada al re-tratamiento, evaluando de acuerdo al criterio EBMT. La Tasa general de mejor respuesta (CR + PR), al re-tratamiento en 130 pacientes fue de 38.5% (IC del 95%: 30.1, 47.4). Eficacia clínica en linfoma de célula del manto que no ha sido tratado previamente (MCL): Es estudio clínico LYM-3002, de Fase III, aleatorizado y de etiqueta abierta, comparó la eficacia y la seguridad de la combinación de Bortezomib, rituximab, ciclofosfamida, doxorrubicina y prednisona (BzR-CAP; n=243), con la combinación de rituximab, ciclofosfamida, doxorrubicina, vincristina y prednisona (R-CHOP; n=244) en pacientes adultos con MCL (en etapas II, III o IV), que no han sido tratados previamente. Los pacientes en el brazo de tratamiento BzR-CAP recibieron Bortezomib (1.3 mg/m2; en los días 1, 4, 8, 11, periodo de descanso en los días 12-21), rituximab 375 mg/m2 IV en el día 1; ciclofosfamida 750 mg/m2 IV en el día 1; doxorrubicina 50 mg/m2 IV en el día 1; y prednisona 100 mg/m2 oralmente en el día 1 hasta el 5 de ciclo de tratamiento de Bortezomib de 21 días. Para los pacientes cuya respuesta se documentó por primera vez en el ciclo 6, se les administraron dos ciclos adicionales de tratamiento. El criterio primario de eficacia fue la sobrevida libre de progresión con base en la valoración del Comité Independiente de Revisión (IRC). Los criterios secundarios de eficacia fueron el tiempo para la progresión (TTP), el tiempo hasta el siguiente tratamiento anti-linfoma (TNT), la duración del intervalo libre de tratamiento (TFI), la Tasa general de respuesta (ORR) y la Tasa de respuesta completa (CR/CRu), la sobrevida general (OS) y la duración de la respuesta. La demografía y las características basales de la enfermedad estuvieron bien balanceadas entre los dos brazos de tratamiento: la edad media de los pacientes fue de 66 años, el 74% fueron hombres, el 66% fueron caucásicos y el 32% asiáticos, el 69% de los pacientes tuvieron un aspiración de médula ósea positiva y/o biopsia positiva de médula ósea para MCL, el 54% de los pacientes tuvieron una puntuación del Índice de Prognosis Internacional (PIPI) ≥ 3, y el 76% tuvieron enfermedad en Etapa IV. La duración del tratamiento (media = 17 semanas) y la duración del seguimiento (media = 40 meses) fueron comparables en ambos brazos de tratamiento. Los pacientes en ambos brazos de tratamiento recibieron una media de 6 ciclos con el 14% de los sujetos en el grupo BzR-CAP y el 17% de los pacientes en el grupo R-CHOP que recibieron 2 ciclos adicionales. La mayoría de los pacientes en ambos grupos completaron el tratamiento, el 80% en el grupo BzR-CAP y el 82% en el grupo R-CHOP. Los resultados de eficacia se presentan en la Tabla 6.
El PFS promedio obtenido por la evaluación del investigador fue de 30.7 meses en el grupo BzR-CAP y de 16.1 meses en el grupo R-CHOP (Radio de Riesgo [HR] = 0.51; p < 0.001). Se observó un beneficio estadísticamente significativo (p < 0.001) en favor del grupo de tratamiento BzR-CAP sobre el grupo R-CHOP para el criterio de TTP (media 30.5 contra 16.1 meses), TNT (media 44.5 contra 24.8 meses) y TFI (media 40.6 contra 20.5 meses). La duración promedio de la respuesta completa fue de 42.1 meses en el grupo BzR-CAP en comparación con los 18 meses en el grupo R-CHOP. La duración de la respuesta general fue de 21.4 meses más largo en el grupo BzR-CAP (media de 36.5 meses contra 15.1 meses en el grupo R-CHOP). Con una duración media del seguimiento de 40 meses, el OS promedio (56.3 meses en el grupo R-CHOP y no se alcanzó en el grupo BzR-CAP), favoreció al grupo BzR-CAP, (HR estimado = 0.80; p=0.173). Hubo una tendencia hacia la sobrevida general prolongada que favoreció al grupo BzR-CAP; el índice de sobrevida estimado de 4 años fue de 53.9% en el grupo R-CHOP y de 64.4% en el grupo BzR-CAP. Pacientes con amiloidosis (AL) de cadena ligera previamente tratados: Se realizó un estudio abierto, no aleatorizado de Fase I/II para determinar la seguridad y la eficacia del Bortezomib en pacientes con amiloidosis (AL) de cadena ligera previamente tratados. No se observó ningún problema nuevo de seguridad durante el estudio y el Bortezomib en particular no exacerbó el daño al órgano blanco (corazón, riñón e hígado). En un análisis exploratorio de eficacia, la Tasa de respuesta del 67.3% (incluyendo una Tasa de 28.6% de CR), medida por medio de la respuesta hematológica (proteína-M), se reportó en 49 pacientes valorables tratados con las dosis máximas permitidas de 1.6 mg/m2 a la semana y 1.3 mg/m2 dos veces a la semana. Para estas cohortes de dosis, el índice de sobrevida combinado de 1 año fue de 88.1%. Población pediátrica:La Agencia Europea de Medicamentos ha pasado por alto la obligación de presentar los resultados de los estudios con Bortezomib en todos los sub-grupos de la población pediátrica con mieloma múltiple y con linfoma de células del manto (véase Dosis y vía de administración para la información sobre el uso pediátrico).
Contraindicaciones: Hipersensibilidad a la sustancia activa, al boro o a cualquiera de los excipientes de la formulación. Enfermedad aguda pulmonar infiltrativa difusa y pericárdica.
Precauciones generales: Cuando Bortezomib se administra en combinación con otros medicamentos, debe consultarse la IPP de los otros medicamentos antes de iniciar el tratamiento con Bortezomib. Cuando se utiliza talidomida, se necesita atención particular en las pruebas de embarazo y los requisitos de prevención (véase Restricciones de uso durante el embarazo y la lactancia). Administración intratecal: Se han reportado casos fatales por la administración intratecal inadvertida de Bortezomib. Bortezomib de 3.5 mg en polvo para solución inyectable es para uso intravenoso o subcutáneo. Bortezomib no debe administrarse intratecalmente. Toxicidad gastrointestinal: La toxicidad gastrointestinal, incluyendo náusea, diarrea, vómito y estreñimiento es muy común con el tratamiento de Bortezomib. Se han reportado de manera poco común, casos de íleo (véase Reacciones secundarias y adversas). Por lo tanto, los pacientes que experimenten estreñimiento deben ser monitoreados cuidadosamente. Toxicidad hematológica: El tratamiento con Bortezomib se asocia comúnmente con toxicidad hematológica (trombocitopenia, neutropenia y anemia). En estudios realizados con pacientes con reincidencia de mieloma múltiple tratados con Bortezomib y en pacientes con MCL que no han sido tratados previamente con Bortezomib en combinación con rituximab, ciclofosfamida, doxorrubicina y prednisona (BzR-CAP), una de las toxicidades hematológicas más comunes fue la trombocitopenia transitoria. Las plaquetas fueron más bajas en el día 11 de cada ciclo del tratamiento con Bortezomib y típicamente se recuperaron hasta los valores basales al comienzo del siguiente ciclo. No hubo evidencia de trombocitopenia acumulativa. El recuento plaquetario promedio fue de aproximadamente 40% del valor basal en los estudios de mieloma múltiple con un solo agente y del 50% en el estudio MCL. En los pacientes con mieloma avanzado, la gravedad de la trombocitopenia estaba relacionada con la cuenta de plaquetas previa al tratamiento: para las cuentas de plaquetas de línea base < 75,000/ml, el 90% de 21 pacientes tuvieron una cuenta de ≤ 25,000/ml durante el estudio, incluyendo el 14% < 10,000/ml; en contraste, con una cuenta de plaquetas de línea base de > 75,000/ml, sólo el 14% de 309 pacientes tuvieron una cuenta de ≤ 25,000/ml durante el estudio. En los pacientes con MCL (estudio LYM-3002), se observó una incidencia mayor (56.7% vs. 5.8%) de trombocitopenia de Grado ≥ 3 en el grupo de tratamiento de Bortezomib (BzR-CAP) en comparación con el grupo de tratamiento sin Bortezomib (rituximab, ciclofosfamida, doxorrubicina, vincristina y prednisona [R-CHOP]). Los dos grupos de tratamiento fueron similares con referencia a la incidencia general de todos los eventos de sangrado de todos los grados (el 6.3% en el grupo BzR-CAP y el 5.0% en el grupo RCHOP) así como todos los eventos de sangrado de Grado 3 y mayor (BzR-CAP: 4 pacientes [1.7%]; R-CHOP: 3 pacientes [1.2%]). En el grupo BzR-CAP, el 22.5% de los pacientes recibieron transfusiones de plaquetas en comparación con el 2.9% de los pacientes en el grupo R-CHOP. Se han reportado hemorragias intracerebrales y gastrointestinales en asociación con el tratamiento de Bortezomib. Por eso, se deben monitorear el conteo de plaquetas previo a cada dosis de Bortezomib. La terapia con Bortezomib debe retirarse cuando la cuenta de plaquetas sea < 25,000/ml o, en el caso de la combinación con melfalán y prednisona, cuando la cuenta de plaquetas es de ≤ 30,000/ml (véase Dosis y vía de administración). El beneficio potencial del tratamiento debe ser cuidadosamente evaluado en comparación con los riesgos, particularmente en el caso de trombocitopenia moderada a grave y los factores de riesgo de sangrado. Las cuentas sanguíneas completas (CBC) con recuentos diferenciales que incluyan a las plaquetas deben ser monitoreadas con frecuencia durante el tratamiento con Bortezomib. La transfusión de plaquetas debe considerarse cuando sea clínicamente apropiado (véase Dosis y vía de administración). En los pacientes con MCL, se observó neutropenia transitoria reversible entre los ciclos de tratamiento, sin evidencia de neutropenia acumulativa. Los neutrófilos se encontraron más bajos en el día 11 de cada ciclo de tratamiento con Bortezomib y se recuperaron hasta su valor basal en el siguiente ciclo. En el estudio LYM-3002, el factor estimulador de colonias se administró al 78% de los pacientes en el brazo BzR-CAP y al 61% de los pacientes en el brazo R-CHOP. Debido a que los pacientes con neutropenia se encuentran con mayor riesgo de infecciones, deben ser vigilados en búsqueda de signos y síntomas de infección y deben de recibir tratamiento oportuno. Los factores de estimulación de colonias de granulocitos pueden administrarse por toxicidad hematológica de acuerdo con la práctica estándar local. El uso profiláctico de factores estimuladores de colonias de granulocitos deben considerarse en caso de retrasos repetidos en la administración del ciclo (véase Dosis y vía de administración). Reactivación del virus del herpes zoster: La profilaxis antiviral se recomienda en los pacientes que están siendo tratados con Bortezomib. En el estudio de Fase III en pacientes con mieloma múltiple que no ha sido tratado previamente, la incidencia general de la reactivación del herpes zoster fue más común en los pacientes tratados con Bortezomib+Melfalán+Prednisona en comparación con Melfalán+Prednisona (14% vs. el 4%, respectivamente). En pacientes con MCL (estudio LYM-3002), la incidencia de la infección de herpes zoster fue de 6.7% en el brazo BzR-CAP y de 1.2% en el brazo R-CHOP (véase Reacciones secundarias y adversas). Reactivación e infección por el Virus de Hepatitis B (HBV):Cuando el rituximab se utiliza en combinación con el Bortezomib, la búsqueda del HBV debe realizarse siempre en pacientes bajo riesgo de infección de HBV antes de iniciar el tratamiento. Los portadores de hepatitis B y los pacientes con un historial de hepatitis B deben ser monitoreados cuidadosamente en búsqueda de signos clínicos y de laboratorio de infección activa por este virus durante y después del tratamiento de combinación de rituximab con Bortezomib. La profilaxis antiviral debe considerarse. Refiérase al Resumen de Características del Producto del rituximab para más información. Leucoencefalopatía multifocal progresiva (PML):Se han reportado casos muy raros con causalidades desconocidas de la infección por el virus John Cunningham (JC), resultando en PML y muerte, en pacientes tratados con Bortezomib. Los pacientes diagnosticados con PML obtuvieron terapia inmunosupresora concurrente o previa. La mayoría de los casos de PML se diagnosticaron dentro de los primeros 12 meses de la primera dosis de Bortezomib. Los pacientes deben ser monitoreados en intervalos regulares en búsqueda de síntomas nuevos o síntomas neurológicos que empeoran o signos que puedan sugerir PML como parte de un diagnóstico diferencial de los problemas de CNS. Si se sospecha un diagnóstico de PML, los pacientes deben referirse a un especialista en PML e iniciar medidas apropiadas de diagnóstico para PML y descontinuar el Bortezomib si el diagnóstico de PML se confirma. Neuropatía periférica: El tratamiento con Bortezomib se asocia comúnmente con neuropatía periférica, de predominio sensorial. Sin embargo, se han reportado casos de neuropatía motora grave con o sin neuropatía periférica sensorial. La incidencia de neuropatía periférica aumenta tempranamente en el tratamiento y se ha observado que lleguen a su pico durante el ciclo 5. Se recomienda que los pacientes sean evaluados cuidadosamente en búsqueda de síntomas de neuropatía como sensación de ardor, hiperestesia, hipostesia, parestesia, incomodidad, dolor neuropático o debilidad. En el estudio de Fase III, que comparó la administración de Bortezomib por vía intravenosa vs. subcutánea, la incidencia de neuropatía periférica de Grado ≥ 2 fue de 24% para el grupo de inyección subcutánea y de 41% para el grupo de inyección intravenosa (p=0.0124). La neuropatía periférica de Grado ≥ 3 ocurrió en el 6% de los pacientes en el grupo de tratamiento subcutáneo en comparación con el 16% en el grupo de tratamiento intravenoso (p=0.0264). La incidencia de la neuropatía periférica de todos los grados con Bortezomib administrado por vía intravenosa se encontró más bajo en los estudios históricos con Bortezomib administrado intravenosamente que en el estudio MMY-3021. Los pacientes que experimentan neuropatía periférica nueva o que empeora deben ser sujetos a evaluaciones neurológicas y pueden requerir un cambio en la dosis, el horario o la vía de administración a subcutánea (véase Dosis y vía de administración). La neuropatía se ha manejado con tratamiento de sostén y otras terapias. La evaluación neurológica temprana y regular en búsqueda de síntomas de neuropatía emergente debe considerarse en pacientes que reciben Bortezomib en combinación con productos médicos que se sabe que están asociados con neuropatía (por ejemplo, talidomida), así como también considerar la reducción apropiada de dosis o descontinuar el tratamiento. Además de la neuropatía periférica, puede haber una contribución de neuropatía autonómica a algunas reacciones adversas como hipotensión postural y estreñimiento grave con íleo. La información de neuropatía autonómica y su contribución a estos efectos no deseables es limitada. Convulsiones: Pocas veces se han reportado convulsiones en pacientes sin historial previo de convulsiones o epilepsia. Se requiere cuidado especial cuando se tratan pacientes con factores de riesgo de convulsiones. Hipotensión: El tratamiento con Bortezomib se asocia comúnmente con hipotensión ortostática/postural. La mayoría de las reacciones adversas son leves a moderadas en intensidad y se observan a través del tratamiento. Los pacientes que desarrollaron hipotensión ortostática con Bortezomib (inyectado intravenosamente) no mostraron evidencia de hipotensión ortostática previa al tratamiento. La mayoría de los pacientes requirieron tratamiento para su hipotensión ortostática. Una minoría de pacientes con hipotensión ortostática experimentó eventos sincopales. La hipotensión ortostática/postural no está relacionada estrechamente con la infusión de bolo del Bortezomib. El mecanismo de este evento se desconoce aunque algún componente